- 26 abril, 2020
- Posted by: Yamid Lopez
- Categoría: Noticias, Principal
Los reactivos son útiles en la primera etapa de análisis de pruebas, en la que se separa el material biológico que proviene del paciente – su ADN – del material genético propio del virus.
Es un gesto poco usual de parte de la empresa, el gigante francés Biomérieux aceptó hacer la donación de su receta de producto reactivo al laboratorio nacional de microbiología, con el objetivo de que Canadá esté en la capacidad de producir rápidamente más pruebas para el COVID-19.
Katia Gagnon
La Presse
“Era un gesto ineludible y excepcional para responder a una situación excepcional. Es la primera vez en casi 60 años de existencia que la empresa transfiere así sus conocimientos. Nuestra dirección general no lo dudó ni un segundo, dice Xavier Nouvelot, quien dirige la filial canadiense de Biomereux. Para nosotros, la industria hace parte de la solución a esta crisis.”
La empresa francesa, que tiene filiales en 44 países, produce reactivos que son útiles en la primera etapa de análisis de la prueba, en la que se separa el material biológico que proviene del paciente -ADN – del material genético propio del virus.
Aún si la empresa prácticamente quintuplicó la producción de productos reactivos desde el comienzo de la pandemia, es imposible responder totalmente a la demanda, asegura Nouvelot.
“La demanda es monstruosa. El volumen de la demanda corresponde a 10 o 15 veces más de lo que producimos en tiempo normal. Es exponencial, no alcanzamos a cubrirla.” Xavier Nouvelot, dirigente de la filial canadiense de Biomereux.
Es en este contexto que se aceptó ceder la receta de la fórmula del reactivo al laboratorio nacional de microbiología, ubicado en Winnipeg.
“Hemos transferido la receta hace una semana, ellos están viendo cómo pueden producir. Por nuestra parte, seguiremos nuestros procesos. Lo que el laboratorio nacional va a producir, se agregará al mercado” Explica Nouvelot.
En rueda de prensa, el martes, El primer ministro Legault hizo alusión a esta situación, mencionando que Quebec pronto se quedaría corto de material reactivo para realizar las miles de pruebas hechas cada día en su territorio. El primer ministro precisó que los laboratorios quebequenses tenían un stock de reactivos para aproximadamente una semana.
Desde el principio de la crisis del COVID-19, al director del laboratorio de salud pública de Quebec (LSPQ) le preocupa la disponibilidad de material reactivo. “La demanda de material reactivo es mundial. Todo el mundo los quiere, declaró el doctor Michel Roger, director del LSPQ. Sí, tenemos preocupaciones. Todos los días, me pregunto si vamos a tener el reactivo para nuestros análisis. Y en tiempos de pandemia, el quid del asunto está en hacer pruebas”
Las etapas de la prueba del COVID-19:
-Sacar una muestra de la nariz y la garganta del paciente con un copito de algodón.
-Recuperar el material bilógico del copito y separar el ADN de las células del paciente del ARN del virus para un tratamiento químico. Es ahí que intervienen los reactivos producidos por Biomereux
– Amplificar las moléculas de ARN para estar en la capacidad de detectarlas, con la ayuda de un aparato PCR.
-Detectar la presencia del ARN del coronavirus en la muestra utilizando otros materiales reactivos.